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"El Amor Que No Se Atreve a Pronunciar su Nombre" 

Una breve historia de la sexualidad y el choque en el arte moderno y contemporáneo.

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Olympia - Edouard Manet (1863)

Cuando se exhibió por primera vez en el Salón de París de 1865, la pintura Olimpia (1863) de Édouard Manet, que presenta a una mujer desnuda, Olympia, reclinada sobre una cama, sorprendió al público. Treinta años después, a través del Canal de la Mancha, una representación lingüística más que visual de la sexualidad causó otra controversia.

EL PROYECTO DEL GENOMO DE ARTE

POR VICTORIA ELIZABETH MIGUEL

El juicio de Oscar Wilde estaba dominado por el significado de la frase "el amor que no se atreve a pronunciar su nombre", normalmente interpretado como un eufemismo para la homosexualidad. En su defensa, Wilde ofreció otra interpretación informada por una concepción clásica del amor que enumera varias variedades diferentes-eros, el amor romántico o erótico, siendo sólo uno de muchos. No sólo la defensa de Wilde nos recuerda las muchas formas de amor, sino que también indica que nuestra comprensión del amor se construye culturalmente.

Hemos llegado a equiparar el amor con el eros, haciendo lo romántico y lo erótico inextricable, y es esta concepción del amor, percibida como explícita en Olimpia y implícita en la frase "el amor que no se atreve a pronunciar su nombre" La sociedad del siglo. Desde entonces, los historiadores del arte han establecido paralelos entre la Olimpiada de Manet y la Venus of Urbino de Tiziano (1538), La Maja Desnuda de Francisco de Goya (1797-1800) y la Gran Odalisca de Jean-Auguste-Dominique Ingres (1814) Todas las cuales presentan reclinables desnudos femeninos en composiciones casi idénticas. La forma desnuda es común en la historia del arte occidental, lo que plantea la pregunta: ¿cómo transcurrió este sujeto clásico en el reino de lo chocante y provocativo? El historiador de arte Kenneth Clark sugirió que se puede hacer una distinción entre el desnudo y el desnudo; El primero es parte de la vida cotidiana, mientras que el último es el ámbito del arte. Estas dos categorías han adoptado una distinción más: el término desnudo se utiliza para describir el arte que tiende hacia un realismo inquebrantable, mientras que el desnudo implica la forma humana idealizada.

La sexualidad profana y explícita de Olimpia es transmitida por su mirada desafiante y los símbolos que la identifican como una prostituta: el gato negro, la orquídea en el cabello, la joyería y el suntuoso entorno, así como el título de la pintura Prostitutas en París durante la década de 1860. Juntos, estos elementos caracterizan a Olimpia como más desnuda que desnuda. Mientras que la audiencia contemporánea se sorprendió por esta imagen rara de la sexualidad femenina segura, todavía era una imagen mediada por un artista masculino. La modelo, Victorine-Louise Meurent, no expresaba su propia sexualidad.


Históricamente, la literatura -no el arte visual- ejerció la mayor influencia sobre nuestra concepción del amor, informándola y modelándola desde la codificación del amor cortesano en la época medieval hasta el desarrollo del género literario romántico en el siglo XIX. Como Wilde señaló, el arte no imita la vida, la vida imita el arte. En la segunda mitad del siglo XX, sin embargo, los artistas visuales habían comenzado a dirigir y representar la sexualidad más directamente de lo que había sido posible en la literatura.

El arte feminista no se centra exclusivamente en cuestiones de sexualidad y sensualidad femeninas; La artista Suzanne Lacy identificó su objetivo de "influir en actitudes culturales y transformar los estereotipos". En su exposición individual de 1972, "La política sexual del arte feminista", Anita Steckel invirtió efectivamente los papeles tradicionales de hombres y mujeres en el arte occidental a través de su Representaciones de genitales masculinos. Hannah Wilke y Carolee Schneemannused sus propios cuerpos para explorar la sensualidad femenina y la sexualidad. En S.O.S.Starifying Object Series (1974-1982), una serie de fotografías de autorretrato, Wilke adopta las poses de modelos de glamour con su cuerpo desnudo cubierto de cicatrices en forma de vagina formada por goma de mascar. La exposición "Prostitución" de Cosey Fanni Tutti en el ICA de Londres, perfectamente a horcajadas de la distinción de Clark entre el desnudo y el desnudo. La artista reclamó como su propia obra imágenes de sí misma tomadas como un modelo de pornografía. El arte de Tutti, así como las obras de Steckel, Joan Semmel y Betty Tompkins, aparece en la exposición actual "Black Sheep Feminismo: El Arte de la Política Sexual" en Dallas Contemporary. El espectáculo también explora la influencia de estos artistas en la serie de Jeff Koons "Made in Heaven" (1989), que consiste en fotografías sexualmente explícitas de sí mismo y su futura esposa, la estrella porno La Cicciolina.

Un artista masculino diferente es quizás mejor conocido por crear imágenes tabú de la sexualidad y el amor. Robert Mapplethorpe también abrazó la influencia visual de la pornografía, pero transformó la desnudez de los miembros reales de una Subcultura sexual en el perfectamente formado, idealizado desnudo del arte. Los artistas de los años setenta y ochenta que exploraron diferentes tipos de sexualidad y sensualidad atrajeron la atención hacia voces previamente marginadas. Los artistas modernos tienden a reflejar una visión más amplia del amor en su arte. Felix Gonzalez-Torres "Sin título", 1992Blain | SouthernSarah LucasI SCREAM DADDIO (Vista de instalación), 201556a Bienal de Venecia Artistas contemporáneos exploran los muchos matices y narraciones del amor. Sus enfoques incluyen lo simbólico, tal como lo ejemplifica Untitled de Felix Gonzales Torres (1991), una representación alegórica del socio del artista, Ross Laycock, que murió de una enfermedad relacionada con el SIDA en 1991. El trabajo comprende 175 Libras de caramelo, que corresponde al peso corporal ideal de Laycock. La cantidad de dulces fluye y fluye a medida que los espectadores toman las piezas y la institución anfitriona repone continuamente la pila. Sarah Lucas tiene una mirada burlona y humorística de la sexualidad en las esculturas que representan el cuerpo humano a través de objetos inanimados como huevos fritos, cubos y frutas y verduras, mientras que Tracy Emin es todo el mundo que he dormido con 1963-1995 (1995) y Glenn Ligon Lest We Forget (1998) abraza narraciones sutiles de amor y sexualidad. Las relaciones heterosexuales son reexaminadas a través de metodologías etnográficas en obras como Ori Gersht y Tracey Ferguson Day by Day (1996-97) y Sophie Calle's Take Care of Yourself (2007), mientras que la película de Steve McQueen, Bear (1993), describe al artista luchando desnudo Con otro hombre, reafirma el poder de lo meramente sugestivo. La película recuerda también las pinturas de Francis Bacon como Estudios del Cuerpo Humano (1979), que, al igual que Olimpia, nos recuerdan la capacidad transformadora que comparten el arte y el amor y su capacidad para revitalizar las viejas formas en nuevos contextos.

VICTORIA MIGUEL
(VERSION EN INGLES)

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